El presidente Luis Arce propuso ayer, en el Encuentro Mundial de los Pueblos por Nuestra Madre Tierra y Contra la Crisis Climática, 10 acciones en el ámbito nacional e internacional para la defensa del planeta.

“Como Bolivia tenemos que seguir firmes y consecuentes con nuestra lucha para dar una solución definitiva a la crisis climática desde la perspectiva de los pueblos”, dijo la autoridad y presentó las siguientes propuestas.

Primera.- La lucha frontal contra el capitalismo, fuente de origen del desastre ambiental, mediante el empoderamiento de los pueblos en la ruta de su liberación, porque el poder es del pueblo y para el pueblo, y en esta lucha liberar a todos los seres vivos de la Madre Tierra que se encuentran bajo la explotación mercantilista y capitalista.

Segunda.- Seguir fortaleciendo el papel del Estado en el control de los recursos naturales estratégicos, promoviendo la distribución de los ingresos, para beneficio, no sólo de los seres humanos, sino de toda la Madre Tierra.

Tercera.- Desarrollar y fortalecer las economías comunitarias para la generación de riqueza para los pueblos, impulsando lo que denominamos la economía de la Madre Tierra.

Cuarta.- Avanzar en una transición energética que respete el principio de equidad y responsabilidades comunes, pero diferenciadas de los países. Los países del capitalismo central deben aportar más y compensar más a los de la periferia.

Quinta.- Impulsar en todos los ámbitos y niveles relaciones armónicas, equilibradas y complementarias entre los seres humanos y con la naturaleza, sin la mercantilización.

Sexta.- Reducir todas las formas de inequidad y explotación de los seres humanos y avanzar en relaciones equitativas entre hombres y mujeres, y en el fortalecimiento de sus relaciones complementarias con todos los seres vivos de la Madre Tierra.

Séptima.- Impulsar la descolonización de nuestros pueblos y de nuestras culturas para fortalecer nuestra relación con la Pachamama.

Octava.- Promover la ciudadanía universal, que elimine las fronteras y los muros entre las y los ciudadanos libres del mundo y podamos definir en todos los rincones del mundo la cultura de la vida.

Novena.- Promover la tecnología como un bien común para todos los pueblos y que sea utilizada para beneficiar a la humanidad y a la Madre Tierra.

Décima.- Continuar con la lucha anticolonialista, anticapitalista y antiimperialista y por la senda de la marcha del horizonte civilizatorio del vivir bien.

Arce explicó que la crisis climática es la manifestación de la irracionalidad, no de los seres humanos, sino de un sistema capitalista que prioriza y hace exclusiva la razón de la ganancia rápida, perdiendo contacto con la Madre Tierra.